Green book. Y la otredad
Al ver esta película con 5 nominaciones al Oscar 2019, quedé absolutamente conmovido. Se trata de una película ligera, hasta familiar, con un discurso inclusivo que nos deja reflexionando y además, cuenta con excelentes actuaciones.
Feel Good Movie, es el término utilizado para las películas cuyo objetivo radica en hacernos sentir bien, en dejarnos una moraleja o enseñanza. Generalmente tienen finales felices y suelen mover nuestros sentimientos llevándonos de la risa al llanto y viceversa. Green Book es la historia de Tony Lip, un italo-americano, machín, medio racista que al quedar desempleado y con una familia que mantener, decide aceptar el trabajo de chofer para un famoso pianista negro, con tendencias homosexuales, solitario e intelectual. En el viaje se enfrentan a la discriminación y descubren que a pesar de sus diferencias pueden ser grandes y honestos amigos.
La película se sostiene por un ritmo ágil y ligero, bien manejado por el director. Y sobre todo por unas excelentes interpretaciones por parte de los actores principales. Viggo Mortensen hace de Italo-americano. Un hombre con muchos prejuicios y defectos. Pero honesto y Mortensen logra ser encantador y resaltar el carácter humano del personaje. Además de su cambio físico para la película, logra transmitir una gama de emociones de manera excelente. Una de sus mejores actuaciones.
Mahersahala Ali interpretando al famoso pianista Don Shirley, logra darle una complejidad exquisita a su personaje. Para mí, tiene su segundo Oscar a mejor actor de reparto, casi asegurado. Y es que le imprime a su personaje esa fortaleza, dignidad y fragilidad, hacia un creador talentoso, solitario, alcohólico, homosexual e intelectual, y demás cualidades contradictorias para un solo personaje. Y lo logra, cambiando de la comedia al drama con una facilidad, sorprendente.
En esencia la película es tangencialmente una Biopic sobre Don Shirley.
Se podría decir que el filme es algo complaciente con el espectador y hasta algo predecible. Pero es interesante como bajita la mano el director nos genera varias reflexiones muy interesantes. El título hace referencia a una guía de lugares permitidos para los afroamericanos que viajaban al sur de los Estados Unidos. Que como recordarán eran los estados a favor de la esclavitud. Y este aspecto es bien aprovechado tanto por el director y el escritor, para echar en cara la doble moral, la xenofobia y la segregación social que había en los años 60´s y que sigue en nuestros días.
Resulta muy interesante como el personaje de Don Shirley, tiene una especie de intención de lucha por los derechos igualitarios, y al mismo tiempo tiene una discriminación interiorizada. Hay una escena en donde el famoso pianista vestido elegantemente, bajar del coche frente a un campo de esclavos afroamericanos en las peores condiciones. Ellos lo miran y el evade la mirada. Una escena muy fuerte, que sin necesidad de diálogos, genera diversas emociones en el espectador.
La película plantea que todos estamos en un constante viaje en busca de nuestra identidad. Y que las diferencias, del que es diferente, enriquece el crecimiento de las personas.
Una película altamente recomendable. Ligera, divertida, y conmovedora. Una bocanada de aire fresco entre tanto odio y desconfianza ante el prójimo.
