Sólo un día, exitosa temporada en el Centro Cultural del Bosque
“¿Qué pasaría si tuvieras sólo un día de vida?” La pregunta por la muerte es una de las grandes interrogantes del hombre que genera un profundo sentimiento de incertidumbre, sin embargo fácilmente olvidamos que el concepto mismo es una idea sin sentido si no se toma en cuenta su antónimo directo: la vida. Sólo un día es una obra teatral del dramaturgo Martin Baltscheit que invita al público infantil a pensar en las mejores cosas que realmente importan a partir de las implicaciones de la filosofía carpe diem: “toma el día/aprovecha el momento”.
Esta puesta en escena estuvo presentándose en la Sala Xavier Villaurrutia del Centro Cultural del Bosque, donde el público era recibido por una simpática Abuela que nos relataba la más bella historia que le contaba su padre: la de una pareja de amigos conformada por un huraño jabalí y un astuto zorro que un buen día conocieron a Efímera, una mosca de mayo que no conocía lo pasajero de su existencia en este mundo. Incapaces de revelarle que la naturaleza de su especie únicamente contemplaba una vida de 24 horas, el jabalí le dice a la mosca que son los zorros quienes únicamente viven un día. Conmovida ante aquella supuesta condición, Efímera decide hacer de aquel día un lapso inmejorable para el zorro. Es así como los tres emprenden divertidas aventuras en un sólo día lleno de juegos, diversión, y la mejor amistad que se puede pedir.
El elenco que participó en esta temporada estuvo conformado por Ix-Chel Muñoz como Efímera, Jorge Caballero como el Jabalí, Miguel Jiménez como el zorro y Yadira Pérez como la Abuela. Fue un elenco inmejorable que -caracterizado no de manera obvia ni explícita aunque sí muy ingeniosa- ejecutaba movimientos bien diseñados para construir personalidades afines a los rasgos conductuales de cada uno de los animales. La composición escénica dependía únicamente de la iluminación y pocos elementos transitables como un marco colgante y un juego de prismas que dependiendo de su disposición servía como mesa, silla, o escaleras entre otros elementos, además de un montón de cachivaches manejados por la Abuela que hacían la función de utilería y efectos de sonido.
Sólo un día tuvo funciones los sábados de mayo y junio. El cierre de temporada tuvo lugar el pasado 25 de junio, aunque se anunció que posiblemente regrese aunque en una cede distinta.