Las musas huérfanas
Seres mitológicos que representan a divinidades inspiradoras de la música y del arte, es decir las musas, las cuales eran nueve dentro de la cultura griega, y como bien lo indican, su objetivo era inspirar y ayudar a que la gente encontrara sus ideas; y es bajo esta inspiración que el dramaturgo canadiense Michel Marc Bouchard escribe la obra Les Muses orphelines, la cual es traducida y llevada al escenario en México por el director, actor, traductor y maestro de teatro Boris Schoemann, quien presenta todos los domingos a las 18:00 hrs., hasta el 17 de diciembre en la Sala Novo del Teatro La Capilla con el nombre de “Las musas huérfanas”.
En las musas huérfanas nos enfrentamos a una historia de cuatro hermanos, tres mujeres y un hombre, que se quedaron huérfanos desde pequeños, pues su padre murió en la guerra y su madre los abandonó por irse con otro hombre. Sin embargo, la hija menor, Isabelle, quien sufre de cierto mongolismo, desconoce esta verdad, pues para ella su madre murió, pero los demás hermanos saben la cruda realidad. Isabelle decide inventar una mentira para reunir a sus tres hermanos, y es así, que Catherin, la hermana mayor y la encargada de cuidar a Isabelle, es sorprendida por la llegada de sus otros dos hermanos, Luc y Martine, quienes vienen de España y Alemania respectivamente. En este encuentro habrá enfrentamientos, declaraciones, develaciones y grandes sorpresas.
Los encargados de dar vida a los personajes de esta obra son: Indira Pensado en el personaje de Martine, una soldado lesbiana; Llever Aíza López como Luc, un escritor con gran sed de venganza y controversia al usar ropa femenina; Tania González Jordán en el personaje de Catherin, una maestra que adopta la figura materna y Carmen Mastache como Isabelle, destacándose en la creación del personaje de una mujer con mongolismo, pero con gran carácter. Los cuatro hacen vibrar al espectador al transmitir una serie de emociones que se convierte en una montaña rusa de sensaciones, donde nos llevan desde la risa para después conmovernos y exaltarnos.
Utilizando las paredes blancas del espacio escénico, el mobiliario es el que termina de dar la cosmovisión que se plantea en la obra, este mobiliario está compuesto por una mesa, cuatro sillas, dos bancos donde los actores realizan sus cambios de vestuario y adoptan una energía neutra para desaparecer escénicamente. El vestuario está compuesto por ropa realista en colores blanco y negro, haciendo que se resalte tanto con el fondo blanco del espacio como el color de los muebles de madera natural. Los elementos de utilería de igual forma complementan la contextualización de la escena, siendo interesante la propuesta de que existan elementos físicamente y otros únicamente mencionados y simbolizados. La iluminación, así como la musicalización, sencilla, simplemente aportan la focalización hacia el trabajo actoral de los ejecutantes.
Las musas huérfanas es una obra de teatro que desde el primer momento atrapa la atención del espectador y que inmiscuye en un ir y venir de chantajes y mentiras cargadas de humor negro, donde nos invitan a reflexionar sobre el por qué una familia, compuesta por cuatro hermanos, puede llegar a hacerse daño e insultarse, pues cuando los seres humanos nos hacemos pedazos entre nosotros, realmente nos hacemos pedazos dentro de nosotros. Esta es una obra, que indiscutiblemente no se pueden perder y que al final, quedarán con un gran sabor de boca y sorprendidos por el gran desenlace.
Sala Novo del Teatro La Capilla
Madrid 13, Col. Del Carmen, Del. Coyoacán
Domingo 18:00 hrs.
Hasta el 17 de diciembre de 2017
Dirección y traducción: Boris Schoemann
Dramaturgia: Michel Marc Bouchard
Elenco: Indira Pensado, Carmen Mastache, Llever Aíza López y Tania González Jordán.