La isla de los perros
Nuestra historia como mexicanos esta marcada por la conquista de los españoles, lo cual fue un acontecimiento que cambio nuestra cosmovisión, y a partir de ahí nuestra cultura ha estado supeditada a la sublevación y al mismo tiempo a la abnegación de siempre sentirnos como una cultura inferior ante la foránea, con un complejo de servilismo, o es así como Guillermo León, escritor y director, de la obra “La isla de los perros”, colabora junto con la directora Itzhel Razo, quienes retratan una sociedad que jamás ha superado el haber sido conquistados y gobernados por los españoles así como las demás culturas que poco a poco hemos permitido que nos vayan permeando. Una obra que se presenta todos los miércoles a las 20:30 hrs., hasta el 29 de noviembre en el Centro Cultural Carretera 45.
La isla de los perros es un unipersonal, donde vemos a un hombre que representa a la cultura española durante la conquista y que nos va relatando desde una perspectiva hostil los sucesos históricos y sociales que fueron desencadenándose desde la vista de personalidades como Octavio Paz, Juan Rulfo y Carlos Fuentes. Siendo un discurso reflexivo y filosófico sobre lo que ha significado la mexicanidad a partir de la colonización y que aborda conceptos como la palabra “chingada”, para mostrarnos cómo surgió el mundo que conocemos desde la unión de los contrarios, de cómo la raza mexicana es producto de la sangre violada. Para concluir que todos los días se inventa la tierra, entendida como el mundo que conformamos y en el cual convivimos.
El encargado de interpretar y comunicar este cúmulo de ideas y conceptos a través de su actuación es el actor Marco Vidal, quien supera el reto de realizar este monólogo, dando una catedra actoral donde el matiz, la intención, el tempo y la misma actoralidad hacen que represente una exquisitez para el espectador, dónde según la progresión del argumento, va desmembrando nuestra cultura hasta resaltar la valía de nuestras verdaderas raíces prehispánicas. Cabe señalar el trabajo de la actriz Graciela López, quien, con una actuación casi estática, simboliza al pueblo conquistado (los mexicanos), accionando en pocos momentos pero significativos, lo cual requiere de una gran habilidad para no robar foco de atención, su trabajo logra contener la energía hasta volverla neutra y desaparecer para cobrar vida específicamente cuando la misma obra lo requiere.
La escenografía es un conjunto de elementos simbólicos, como el petate que delimita el rango de movimiento escénico, rodeado de ladrillos, tierra, piedras adornado con algunas ramas secas. El vestuario cumple con la caracterización de la vestimenta española por una parte y la prehispánica por la otra. La iluminación, diseño de Aurelio Palomino, hace que visualmente atrape al espectador y para crear atmosferas casi místicas. Sin la necesidad de hacer uso de la utilería, mas que de una espada; la actuación se vuelve en un elemento fundamental ya que la presencia de Graciela López hace la función de dispositivo escenográfico.
La isla de los perros forma parte del Ciclo de Dramaturgia Ambulante, siendo esta una de las creaciones que llegó a escena gracias al trabajo conjunto de Vidal, León y ahora con la colaboración de Razo, quienes han conformado un trabajo atractivo en todos los sentidos, donde nos hace cuestionarnos dónde está el verdadero orgullo de llamarnos mexicanos y que es impactante cómo a pesar de las circunstancias que vivimos y que nos han marcado como sociedad, seguimos viviendo para llamarle vida a este conjunto de sucesos que cargamos para que posteriormente se convierta en nuestra historia y que hasta la fecha nos han condicionado cultural y socialmente.
Centro Cultural Carretera 45
Juan Lucas de Lassaga 122. Col. Obrera.
Miércoles 20:30 hrs.
Hasta el 29 de noviembre de 2017
Dirección: Itzhel Razo y Guillermo León
Dramaturgia: Guillermo León
Elenco: Marco Vidal y Graciela López