Hoy se murió mi tortuga
La tortuga es un animal de la familia de los reptiles, caracterizada por tener un tronco ancho y corto, y un caparazón que protege sus órganos internos, es 
descrita comúnmente como una criatura tolerante, paciente y sabia que, aunado a su larga vida, resulta ser un emblema de longevidad y serenidad para muchas culturas; tal vez por esto, es que Valeria Fabbri, autora y directora de la obra “Hoy se murió mi tortuga” selecciona precisamente este animal para contar una historia de amor y de identidad, la cual se presentará los jueves y viernes a las 20:00 hrs., los sábados a las 19:00hrs., y los domingos a las 18:00 hrs., en el Teatro Benito Juárez, hasta el 18 de febrero.
Hoy se murió mi tortuga, es la historia de María que el mismo día que conoció a Roberto su novio, se encontró con una tortuga que también nombró como Roberto, esto debido a que desde la muerte de su padre (llamado Roberto) a nombrado a toda mascota que ha tenido así: “Roberto”. Y es así como esta historia de amor se entrelaza, entre la relación que va creciendo entre Roberto y María, y el amor que también comienza a sentir la tortuga por María. Lo curioso es que la tortuga no tiene conciencia de lo que es, hasta que por fín lo descubre, lo cual la lleva a la muerte, siendo que la pareja de enamorados había prometido estar juntos hasta que se muriera la tortuga.
Bajo la formidable dirección de Valeria Fabbri, los encargados de encarnar a cada personaje son: Michel Abascal como Sustancial (aunque en el programa 
dice Sustancal, lo cual durante la obra lo remarcan), quien se destaca con sus rompimientos al estilo brechtiano, fungiendo como narrador aunque no lo sea; Yoshira Escárrega es María, que encanta con su seductora fuerza interpretativa; Roberto (humano) es realizado por Omar Sorroza; y por último Roberto (tortuga) es interpretado por Daniel Ortiz, a quien se le agradece una actuación llena de gracias y emotividad. Todos en conjunto realizan un trabajo que cautiva por la naturalidad y la sinceridad escénica. Cabe señalar que el personaje de Roberto (tortuga) es alternado también por el actor Hugo Buendía.
Escenográficamente vemos 4 muebles de madera de distintos tamaños, que hacen de mesa y de banco al mismo tiempo, lo cual, al ser utilizados de diferentes maneras y posiciones, dan un juego lúdico e interesante a la vista del espectador, sin que haga falta ningún otro elemento escénico para desarrollar la historia. El vestuario es realista contemporáneo, el cual ayuda a dar una naturalidad vidual, resaltando las actuaciones. La utilería juega un elemento importante, sobre todo la mochila con diseño de camuflaje verde, que es utilizada por Roberto (tortuga) pues nos emite al caparazón precisamente de una tortuga; además aparecen en escena elementos como hojas de papel de diversos colores, un ukulele, celulares, una tasa, etc., los cuales ayudan a la narrativa de la historia. Por último, y no siendo menos importante está la iluminación y la musicalización, que ayudan a acentuar la ficción, además cabe mencionar que la obra abre con un numero coreográfico.
Hoy se murió mi tortuga, en su cuarta temporada, después de haber 
estrenado en el Festival Internacional de Teatro Universitario organizado por la UNAM, es una obra que pretende generar reflexión sobre la importancia que tiene el amor y cuales son o deben ser los valores que lo conforman, donde el amor puede llegar a ser incondicional, hasta que cambian las condiciones; además de cuestionar sobre la concientización o la falsa concientización de nosotros mismos a través de las definiciones que los demás hacen entorno a las cosas o a las personas, donde corremos el riesgo de olvidar quienes somos.
Teatro Benito Juárez
Villalongín #15, Col. Cuauhtémoc. Del. Cuauhtémoc.
Jueves y viernes 20:00 hrs., sábado 19:00 hrs., y domingo 18:00 hrs.
Hasta el 18 de febrero de 2018
Autoría y dirección: Valeria Fabbri
Elenco: Michel Abascal, Yoshira Escárrega, Omar Sorroza, Daniel Ortiz y Hugo Buendía
