Teatro

Ana si no lo ves, no existe

México ocupa el primer lugar mundial en casos de abuso sexual infantil pues se estima que alrededor de 4.5 millones de infantes son víctimas de este ilícito, es de considerarse, que solo el 2 por ciento de los casos son denunciados o dados a conocer. Esta situación alarma como sociedad, pues significa que, como tal, no estamos funcionando; y es así como “Ana si no lo ves, no existe” escrita por Paco Mufote y bajo la dirección de Abel González Gómez, presentan una propuesta teatral donde se denuncia cómo las familias y la sociedad duermen y no quieren despertar a sus demonios, pero esos demonios están ahí, y dejan marcas muy profundas. Una obra que se presentará todos los viernes a las 20:30 hrs., hasta el 27 de octubre, en el Foro 37 Teatro Boutique.

Ana si no lo ves, no existe, narra la historia de una adolescente que sufre el abuso y violación sexual por parte de su padre durante años, donde se enfrenta a esta situación traumaste día a día, dándose acontecimientos como tres embarazos y abortos, el miedo de ser ultrajada, la confusión del amor por su victimario y donde las líneas efectivas se ven trastocadas por la profanación de la sexualidad e intimidad de una niña. Por lo tanto, Ana, para ayudarse a salir adelante, dentro de sus posibilidades se hace amiga de otras dos niñas, quienes son amigas ficticias que le ayudan a sobrellevar la situación de abuso ejercido por su padre.

Son tres las actrices que realizan una excelente interpretación, donde en momentos unifican su personaje en uno mismo, pues, a fin de cuentas, los tres personajes, resultan ser uno mismo, pues las dos amigas ficticias de Ana no son más que un reflejo y creación de ella misma. La encargada de encarnar a Ana es la joven actriz Estephany Hernández, quien logra transmitir la tristeza y desesperación de un acto tan violento como es el abuso. También actúan Paulina Lemus y Paulina Olvera, quienes, en conjunto, hacen que “Ana, si no lo ves, no existe”, sea un confrontamiento reflexivo ante este tipo de actos, escudriñando todos los matices psicológicos que se originan bajo este tipo de circunstancias.

A nivel visual se logra un escenario artísticamente atractivo, donde simbólicamente observamos lo oscuro y lúgubre que puede ser un contexto como el del abuso, que sin que sea literal, ensombrece la existencia de una menor. Con el uso de una cama, una silla, un marco representando la puerta y otros dos simulando ventanas, y una mesita donde hay una vela y un portarretrato, además de unos libros, es lo que termina por ambientarnos en la habitación de una casa “normal” donde se perpetúan este tipo de actos. Con vestuario sencillo pero contemporáneo, contextualizando la intimidad natural de una niña en su habitación, así como la utilería compuesta por cobijas, un cuaderno y pluma, así como un instrumento musical poco usual, que terminan por dibujarnos la cotidianidad de la obra. Cabe mencionar que tanto la iluminación, siendo sobria en la mayoría del tiempo, y los efectos de sonido, usando el mismo canto de una de las actrices, el instrumento musical, los sonidos de la lluvia y truenos, hacen que todo en conjunto sea coherente con lo que se transmite.

Ana si no lo ves, no existe, nos confronta con la cruda realidad, con el simple hecho de no ver algo, no significa que no exista, pues el cuerpo es muy sabio y lo registra todo, tanto olores, como la temperatura y hasta el mismo dolor, haciendo que el alma quede marcada para siempre. En el acto del abuso sexual hacia un infante se queda registrado en todos los aspectos que lo componen, a nivel físico, psicológico, cognitivo, emocional y sentimental; por lo tanto, como sociedad debemos de prestar oídos a este tipo de acontecimientos y comenzar a crear estrategias para evitar este tipo de acciones, y la primera es exhibirla para dejar de creer que estos actos son  aislados, cuando en realidad, son más frecuentes de lo que nos gustaría aceptar.

 

 

Foro 37 Teatro Boutique –  Londres 37, Col. Juárez, Del. Cuauhtémoc.

Jueves 20:30 hrs | Del 2 al 30 de agosto de 2018

Autor: Paco Mufote | Dirección:  Abel González Gómez | Elenco: Paulina Lemus, Sofía Ríos y Cristina Calderón.

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